Tráfico de Armas en África

Con casi 600 millones de armas de fuego en el mundo, y con un estimado de 1 arma por cada 12 personas, es este tipo de comercio, ilegal por lo demás, uno de los más rentables económicamente hablando, así como también uno de los más sanguinarios.
El continente africano, que vive inmerso en innumerables conflictos armados, ya sea por poder, como también por disputas de tribus o simplemente por la propia naturaleza humana, es uno de los territorios más provechosos para los denominados señores de la guerra, aquellos “magnates” que han hecho su fortuna vendiendo los medios para matar, medios que van desde una simple pistola o granada, hasta el armamento más poderoso y complejo, y por los cuales África gasta aproximadamente 18.000 millones de dólares anuales, con un 95% de importación y solo un 5% de producción propia.
El fusil soviético AK-47, con origen en plena segunda guerra mundial, es el que, con su efectividad, simpleza y desempeño en todo terreno, se ha convertido en el favorito, en el top one de ventas de los traficantes de armas, calculándose una cantidad cercana a los 50 millones de unidades alrededor del mundo, sin considerar, además, aquellas que se fabrican de manera ilegal, en un comercio que, con triquiñuelas legales y sobornos solapados, sigue en aumento día a día.